LOS CORAZONES EN LA REVELACIÓN DIVINA

LA BIBLIA REVELA EL SIGNIFICADO PROFUNDO QUE TIENE EL CORAZÓN.

Dios nos hizo a su imagen y semejanza, para que amemos de corazón.
Este deseo de Dios fue rechazado por los hombres que preferimos el pecado.

Pero el Verbo se hizo carne, nos amó con un corazón humano que fue traspasado y derramó hasta la última gota de Su preciosa sangre.  De manera que por medio de El los corazones humanos sean sanados.

La Virgen Santísima entregó su corazón junto con el de Jesús en la cruz.  Así se manifestó en el mas alto grado el amor con que siempre vivió.  Ella guardaba todas las cosas en su corazón.

Dios desea que todos los hombres abran también su corazón a su amor infinito y así vivamos como hijos suyos.  Para lograrlo se nos dan los corazones de Jesús y María.   Estos dos corazones están destinados a reinar sobre todo.  

EL CORAZÓN EN LA SANTA BIBLIA

La palabra "corazón" aparece 873 veces en la Biblia, "corazones" aparece 88.
He aquí algunos ejemplos que nos ayudan a captar su significado:

Génesis 6:5-6
Viendo Yahveh que la maldad del hombre cundía en la tierra, y
que todos los pensamientos que ideaba su corazón eran puro
mal de continuo, le pesó a Yahveh de haber hecho al hombre en la tierra, y se
indignó en su corazón.

Exodo 8:15
Dijeron los magos a Faraón: «¡es el dedo de Dios!» Pero el
corazón de Faraón se endureció, y no les escuchó, como había
dicho Yahveh.

Exodo 28:29
Así llevará Aarón sobre su corazón los nombres de los hijos de
Israel, en el pectoral del juicio, siempre que entre en el
Santuario, para recuerdo perpetuo delante de Yahveh.

Exodo 31:6
En el corazón de todos los hombres hábiles he infundido habilidad para que hagan todo
lo que te he mandado:

Exodo 35:5
Reservad de vuestros bienes una ofrenda para Yahveh. Que
reserven ofrenda para Yahveh todos aquellos a quienes su
corazón mueva: oro, plata y bronce,

Números 15:39
Tendréis, pues flecos para que, cuando los veáis, os acordéis
de todos los preceptos de Yahveh. Así los cumpliréis y no
seguiréis los caprichos de vuestros corazones y de vuestros
ojos, que os han arrastrado a prostituiros.

Deuteronomio 4:8
Y ¿cuál es la gran nación cuyos preceptos y normas sean tan
justos como toda esta Ley que yo os expongo hoy?

Deuteronomio 4:9
Pero ten cuidado y guárdate bien, no vayas o olvidarte de
estas cosas que tus ojos han visto, ni dejes que se aparten de
tu corazón en todos los días de tu vida; enséñaselas, por el
contrario, a tus hijos y a los hijos de tus hijos.

Deuteronomio 4:29
Desde allí buscarás a Yahveh tu Dios; y le encontrarás si le
buscas con todo tu corazón y con toda tu alma.

Deuteronomio 4:39
Reconoce, pues, hoy y medita en tu corazón que Yahveh es el
único Dios allá arriba en el cielo, y aquí abajo en la tierra;
no hay otro.

Deuteronomio 6:5-6
Amarás a Yahveh tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma
y con toda tu fuerza.
Queden en tu corazón estas palabras que yo te dicto hoy.

Deuteronomio 6:7
Se la repetirás a tus hijos, les hablarás de ellas tanto
estás en casa como si vas de viaje, así acostado como
levantado;

Deuteronomio 8:2
Acuérdate de todo el camino que Yahveh tu Dios te ha hecho
andar durante estos cuarenta años en el desierto para
humillarte, probarte y conocer lo que había en tu corazón: si
ibas o no a guardar sus mandamientos.

Deuteronomio 10:16
Circuncidad el prepucio de vuestro corazón y no endurezcáis
más vuestra cerviz,

Deuteronomio 11:16
Cuidad bien que no se pervierta vuestro corazón y os
descarriéis a dar culto o otros dioses, y a postraros ante
ellos;

Deuteronomio 11:18
Poned estas palabras en vuestro corazón y en vuestra alma,
atadlas a vuestra mano como una señal, y sean como una
insignia entre vuestros ojos.

Deuteronomio 15:7
Si hay junto a ti algún pobre de entre tus hermanos, en alguna
de las ciudades de tu tierra que Yahveh tu Dios te da, no
endurecerás tu corazón ni cerrarás tu mano a tu hermano pobre,

Deuteronomio 28:47
Por no haber servido a Yahveh tu Dios en la alegría y la dicha
de corazón, cuando abundabas en todo.

Deuteronomio 28:48
Servirás a los enemigos que Yahveh enviará contra ti, con
hambre, sed, desnudez y privación de todo. El pondrá en tu
cuello un yugo de hierro hasta que te destruya.

Deuteronomio 29:3
Pero hasta el día de hoy no os había dado Yahveh corazón para
entender, ojos para ver, ni oídos para oír.

Deuteronomio 29:17
No haya entre vosotros hombre o mujer, familia o tribu, cuyo
corazón se aparte hoy de Yahveh vuestro Dios para ir a servir
a los dioses de esas naciones. No haya entre vosotros raíz que
eche veneno o ajenjo.

Deuteronomio 30:6
Yahveh tu Dios circuncidará tu corazón y el corazón de tu
descendencia, a fin de que ames a Yahveh tu Dios con todo tu
corazón y con toda tu alma, para que vivas.

Deuteronomio 30:14
Sino que la palabra está bien cerca de ti, está en tu boca y
en tu corazón para que la pongas en práctica.

Josué 24:22
Josué dijo al pueblo: «Vosotros sois testigos contra vosotros
mismos de que habéis elegido a Yahveh para servirle.»
Respondieron ellos: «¡Testigos somos!» -
Josué 24:23
«Entonces, apartad los dioses del extranjero que hay en medio
de vosotros e inclinad vuestro corazón hacia Yahveh, Dios de
Israel.»

I Reyes 8:58
Que incline nuestros corazones hacia él para que andemos según
todos sus caminos y guardemos todos los mandamientos, los
decretos y las sentencias que ordenó a nuestros padres.

I Crónicas 29:17
Bien sé, Dios mío, que tú pruebas los corazones y amas la
rectitud; por eso te he ofrecido voluntariamente todo esto con
rectitud de corazón, y ahora veo con regocijo que tu pueblo,
que está aquí, te ofrece espontáneamente tus dones.

II Macabeos 2:3
Entre otras cosas, les exhortaba a no apartar la Ley de sus
corazones.

Salmos 28:7
Yahveh mi fuerza, escudo mío, en él confió mi corazón y he recibido ayuda:
mi carne de nuevo ha florecido, le doy gracias de todo corazón.

Salmos 73:26
Mi carne y mi corazón se consumen: ¡Roca de mi corazón, mi porción, Dios por siempre

Salmos 84:3
Anhela mi alma y languidece tras de los atrios de Yahveh,
mi corazón y mi carne gritan de alegría hacia el Dios vivo.

Proverbios 21:2
Al hombre le parecen rectos todos sus caminos,
pero es Yahveh quien pesa los corazones.

Proverbios 24:12
Si dices: «Mira que no lo sabíamos»,
¿acaso el que pesa los corazones no comprende?,
¿el que vigila tu alma, no lo sabe?
El da a cada hombre según sus obras.

Eclesiástico 2:12
¡Ay de los corazones flacos y las manos caídas,
del pecador que va por senda doble!

Isaías 61:1
El espíritu del Señor Yahveh está sobre mí,
por cuanto que me ha ungido Yahveh.
A anunciar la buena nueva a los pobres me ha enviado,
a vendar los corazones rotos;
a pregonar a los cautivos la liberación,
y a los reclusos la libertad;

Isaías 63:17
¿Por qué nos dejaste errar, Yahveh, fuera de tus caminos,
endurecerse nuestros corazones lejos de tu temor?
Vuélvete, por amor de tus siervos,
por las tribus de tu heredad.

Jeremías 14:14
Y me dijo Yahveh: «Mentira profetizan esos profetas en mi
nombre. Yo no les he enviado ni dado instrucciones, ni les he
hablado. Visión mentirosa, augurio fútil y delirio de sus
corazones os dan por profecía.

Jeremías 31:33
Sino que esta será la alianza que yo pacte con la casa de
Israel, después de aquellos días - oráculo de Yahveh -: pon
mi Ley en su interior y sobre sus corazones la escribiré, y
seré su Dios y ellos serán mi pueblo.

Jeremías 32:40
Les pactaré alianza eterna - que no revocaré después de ellos
- de hacerles bien, y pondré mi temor en sus corazones, de
modo que no se aparten de junto a mí;

Baruc 2:30
Pues bien sé que no me escucharán, porque es un pueblo de dura
cerviz; pero se convertirán en sus corazones en el país de su
destierro;

Ezequiel 11:19
Yo les daré un solo corazón y pondré en ellos un espíritu
nuevo: quitaré de su carne el corazón de piedra y les daré un
corazón de carne,

Ezequiel 36:26
Y os daré un corazón nuevo, infundiré en vosotros un espíritu
nuevo, quitaré de vuestra carne el corazón de piedra y os daré
un corazón de carne.


NUEVO TESTAMENTO

Mateo 5:8
Bienaventurados los limpios de corazón,
porque ellos verán a Dios.

Mateo 6:21
Porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.

Mateo 11:29
Tomad sobre vosotros mi yugo, y aprended de mí, que soy manso
y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras
almas.

Mateo 13:15
Porque se ha embotado el corazón de este pueblo,
han hecho duros sus oídos, y sus ojos han cerrado:
no sea que vean con sus ojos,
con sus oídos oigan,
con su corazón entiendan y se conviertan,
y yo los sane.

Mateo 13:19
Sucede a todo el que oye la Palabra del Reino y no la
comprende, que viene el Maligno y arrebata lo sembrado en su
corazón: éste es el que fue sembrado a lo largo del camino.

Mateo 15:8
Este pueblo me honra con los labios,
pero su corazón está lejos de mí.

Mateo 15:18
En cambio lo que sale de la boca viene de dentro del corazón,
y eso es lo que contamina al hombre.

Mateo 15:19
Porque del corazón salen las intenciones malas, asesinatos,
adulterios, fornicaciones, robos, falsos testimonios,
injurias.

Mateo 18:35
Esto mismo hará con vosotros mi Padre celestial, si no
perdonáis de corazón cada uno a vuestro hermano.

Mateo 19:8
Díceles: «Moisés, teniendo en cuenta la dureza de vuestro
corazón, os permitió repudiar a vuestras mujeres; pero al
principio no fue así.

Mateo 22:37
El le dijo:  «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón,
con toda tu alma y con toda tu mente.

Marcos 3:5
Entonces, mirándoles con ira, apenado por la dureza de su
corazón, dice al hombre: «Extiende la mano.» El la extendió
y quedó restablecida su mano.

Marcos 11:23
Yo os aseguro que quien diga a este monte: "Quítate y arrójate
al mar" y no vacile en su corazón sino que crea que va a
suceder lo que dice, lo obtendrá.

Marcos 12:30
Y amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu
alma,  con toda tu mente y con todas tus fuerzas.

Marcos 12:33
Y amarle con todo el corazón, con toda la inteligencia y con
todas las fuerzas, y amar al prójimo como a si mismo  vale
más que todos los holocaustos y sacrificios.

Marcos 16:14
Por último, estando a la mesa los once discípulos, se les
apareció y les echó en cara su incredulidad y su dureza de
corazón, por no haber creído a quienes le habían visto
resucitado.

Lucas 1:51
Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los que son
soberbios en su propio corazón.

Lucas 2:19
María, por su parte, guardaba todas estas cosas, y las
meditaba en su corazón.

Lucas 2:51
Bajó con ellos y vino a Nazaret, y vivía sujeto a ellos. Su
madre conservaba cuidadosamente todas las cosas en su corazón.

Lucas 6:45
El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca lo bueno, y
el malo, del malo saca lo malo. Porque de lo que rebosa el
corazón habla su boca.

Lucas 8:12
Los de a lo largo del camino, son los que han oído; después
viene el diablo y se lleva de su corazón la Palabra, no sea
que crean y se salven.

Lucas 8:15
Lo que en buena tierra, son los que, después de haber oído,
conservan la Palabra con corazón bueno y recto, y dan fruto
con perseverancia.

Lucas 9:47
Conociendo Jesús lo que pensaban en su corazón, tomó a un
niño, le puso a su lado,

Lucas 24:25
El les dijo: «¡Oh insensatos y tardos de corazón para creer
todo lo que dijeron los profetas!

Lucas 24:32
Se dijeron uno a otro: «¿No estaba ardiendo nuestro corazón
dentro de nosotros cuando nos hablaba en el camino y nos
explicaba las Escrituras?»

Lucas 24:38
Pero él les dijo: «¿Por qué os turbáis, y por qué os
suscitan dudas en vuestro corazón?

Juan 12:40
Ha cegado sus ojos,
ha endurecido su corazón;
para que no vean con los ojos,
ni comprendan con su corazón,
ni se conviertan,
ni yo los sane.

Juan 13:2
Durante la cena, cuando ya el diablo había puesto en el
corazón a Judas Iscariote, hijo de Simón, el propósito de
entregarle,

Juan 14:1
«No se turbe vuestro corazón.
Creéis en Dios: creed también en mí.

Juan 14:27
Os dejo la paz,
mi paz os doy;
no os la doy como la da el mundo.
No se turbe vuestro corazón ni se acobarde.

Juan 16:22
También vosotros estáis tristes ahora,
pero volveré a veros y se alegrará vuestro corazón
y vuestra alegría nadie os la podrá quitar.

Hechos 2:26
Por eso se ha alegrado mi corazón
y se ha alborozado mi lengua,
y hasta mi carne reposará en la esperanza

Hechos 2:37
Al oír esto, dijeron con el corazón compungido a Pedro y a los
demás apóstoles: «¿Qué hemos de hacer, hermanos?»

Hechos 2:46
Acudían al Templo todos los días con perseverancia y con un
mismo espíritu, partían el pan por las casas y tomaban el
alimento con alegría y sencillez de corazón.

Hechos 4:32
La multitud de los creyentes no tenía sino un solo corazón y
una sola alma. Nadie llamaba suyos a sus bienes, sino que
todo era en común entre ellos.

Hechos 5:3
Pedro le dijo: «Ananías, ¿cómo es que Satanás llenó tu
corazón para mentir al Espíritu Santo, y quedarte con parte
del precio del campo?

Hechos 7:39
Este es aquel a quien no quisieron obedecer nuestros padres
sino que le rechazaron  para volver su corazón  hacia
Egipto,

Hechos 7:51
«¡Duros de cerviz, incircuncisos de corazón y de oídos!
¡Vosotros siempre resistís al Espíritu Santo! ¡Como vuestros
padres, así vosotros!

Hechos 8:21
En este asunto no tienes tú parte ni herencia, pues tu corazón
no es recto delante de Dios.

Hechos 11:23
Cuando llegó y vio la gracia de Dios se alegró y exhortaba a
todos a permanecer, con corazón firme, unidos al Señor,

Hechos 13:22
Depuso a éste y les suscitó por rey a David, de quien
precisamente dio este testimonio: He encontrado a David,
el hijo de Jesé,  un hombre según mi corazón, que realizará
todo lo que yo quiera.

Hechos 16:14
Una de ellas, llamada Lidia, vendedora de púrpura, natural de
la ciudad de Tiatira, y que adoraba a Dios, nos escuchaba. El
Señor le abrió el corazón para que se adhiriese a las palabras
de Pablo.

Hechos 21:13
Entonces Pablo contestó: «¿Por qué habéis de llorar y
destrozarme el corazón?

Hechos 28:27
Porque se ha embotado el corazón de este pueblo,
han hecho duros sus oídos, y sus ojos han cerrado;
no sea que vean con sus ojos,
y con sus oídos oigan,
y con su corazón entiendan y se conviertan,
y yo los cure.

Romanos 1:21
Porque, habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a
Dios ni le dieron gracias, antes bien se ofuscaron en sus
razonamientos y su insensato corazón se entenebreció:

Romanos 1:24
Por eso Dios los entregó a las apetencias de su corazón hasta
una impureza tal que deshonraron entre sí sus cuerpos;

Romanos 2:5
Por la dureza y la impenitencia de tu corazón vas atesorando
contra ti cólera para el día de la cólera y de la revelación
del justo juicio de Dios,

Romanos 2:29
El verdadero judío lo es en el interior, y la verdadera
circuncisión, la del corazón, según el espíritu y no según la
letra. Ese es quien recibe de Dios la gloria y no de los
hombres.

Romanos 6:17
Pero gracias a Dios, vosotros, que erais esclavos del pecado,
habéis obedecido de corazón a aquel modelo de doctrina al que
fuisteis entregados,

Romanos 10:9
Porque, si confiesas con tu boca que Jesús es Señor y crees en
tu corazón que Dios le resucitó de entre los muertos, serás
salvo.

Romanos 10:10
Pues con el corazón se cree para conseguir la justicia, y con
la boca se confiesa para conseguir la salvación.

II Corintios 6:11
¡Corintios!, os hemos hablado con toda franqueza; nuestro
corazón se ha abierto de par en par.

II Corintios 7:3
No os digo esto con ánimo de condenaros. Pues acabo de deciros
que en vida y muerte estáis unidos en mi corazón.

II Corintios 8:16
¡Gracias sean dadas a Dios, que pone en el corazón de Tito el
mismo interés por vosotros!,

II Corintios 9:7
Cada cual dé según el dictamen de su corazón, no de mala gana
ni forzado, pues:  Dios ama al que da con alegría.

Efesios 1:18
Iluminando los ojos de vuestro corazón para que conozcáis cuál
es la esperanza a que habéis sido llamados por él; cuál la
riqueza de la gloria otorgada por él en herencia a los santos,

Efesios 5:19
Recitad entre vosotros salmos, himnos y cánticos inspirados;
cantad y salmodiad en vuestro corazón al Señor,

Efesios 6:6
No por ser vistos, como quien busca agradar a los hombres,
sino como esclavos de Cristo que cumplen de corazón la
voluntad de Dios;

Filipenses 1:7
Y es justo que yo sienta así de todos vosotros, pues os llevo
en mi corazón, partícipes como sois todos de mi gracia, tanto
en mis cadenas como en la defensa y consolidación del
Evangelio.

Filipenses 1:8
Pues testigo me es Dios de cuánto os quiero a todos vosotros
en el corazón de Cristo Jesús.

Colosenses 3:23
Todo cuanto hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y
no para los hombres.

Filemon 0:12
Te lo devuelvo, a éste, mi propio corazón.

Filemon 0:20
Sí, hermano, hazme este favor en el Señor. ¡Alivia mi corazón
en Cristo!

Hebreos 3:10
Durante cuarenta años.  Por eso me irrité contra esa
generación y dije: Andan siempre errados en su corazón; no
conocieron mis caminos.

Hebreos 3:12
¡Mirad, hermanos!, que no haya en ninguno de vosotros un
corazón maleado por la incredulidad que le haga apostatar de
Dios vivo;

Hebreos 4:12
Ciertamente, es viva la Palabra de Dios y eficaz, y más
cortante que espada alguna de dos filos. Penetra hasta las
fronteras entre el alma y el espíritu, hasta las junturas y
médulas; y escruta los sentimientos y pensamientos del
corazón.

Hebreos 10:22
Acerquémonos con sincero corazón , en plenitud de fe,
purificados los corazones de conciencia mala y lavados los
cuerpos con agua pura.

Hebreos 13:9
No os dejéis seducir por doctrinas varias y extrañas. Mejor es
fortalecer el corazón con la gracia que con alimentos que
nada aprovecharon a los que siguieron ese camino.

Santiago 1:26
Si alguno se cree religioso, pero no pone freno a su lengua
sino que engaña a su propio corazón, su religión es vana.

Santiago 3:14
Pero si tenéis en vuestro corazón amarga envidia y espíritu de
contienda, no os jactéis ni mintáis contra la verdad.

I Pedro 1:22
Habéis purificado vuestras almas, obedeciendo a la verdad,
para amaros los unos a los otros sinceramente como hermanos.
Amaos intensamente unos a otros con corazón puro,

I Pedro 3:3'4
Que vuestro adorno no esté en el exterior, en peinados, joyas
y modas, sino en lo oculto del corazón, en la incorruptibilidad de un
alma dulce y serena: esto es precioso ante Dios.

I Pedro 5:2
Apacentad la grey de Dios que os está encomendada, vigilando,
no forzados, sino voluntariamente, según Dios; no por mezquino
afán de ganancia, sino de corazón;

I Juan 3:17
Si alguno que posee bienes de la tierra,
ve a su hermano padecer necesidad
y le cierra su corazón,
¿cómo puede permanecer en él el amor de Dios?

Hechos 2:37
Al oír esto, dijeron con el corazón compungido a Pedro y a los
demás apóstoles: «¿Qué hemos de hacer, hermanos?»


Editado por Padre Jordi Rivero

siervas_logo_color.jpg (14049 bytes)
Regreso a la página principal
www.catolico.org


Laudetur Jesus Christus.
Et Maria Mater ejus. Amen
Copyright © 1999