SOLTERIA
Estado de soltero, que no está casado
Del latín, Solitarius
La soltería es un auténtico estado de vida en la Iglesia desde el cual la persona esta llamada a entregarse con todas sus fuerzas al amor y al servicio de Dios y del prójimo.
De nuestro correo...
¿Ilegítima la soltería?
Si un matrimonio es ilegítimo cuando no hubo consentimiento, ¿Como puede ser legítimo un estado de soltería cuando no es aceptado por voluntad propia?. No es legítimo. Las cosas impuestas a contragusto, nunca dieron buen fruto. Por lo menos Dios nunca me demostró en mi caso particular que se es feliz en ese estado. Así que no sé de qué felicidad usted me habla.
El Dios del Cristianismo me lo tiene que demostrar a eso concretamente, aquí en vida, sino no creo en el Dios de los cristianos, no existe; o es un Dios sádico, masoquista, injusto; pero para algunos, mientras que a otros les da con todos los gustos.
RESPUESTA
Querido hermano:
El matrimonio requiere consentimiento mutuo porque es una alianza entre dos. Pero el estado de soltería no es una alianza por lo que no requiere consentimiento. La soltería es un estado de vida que puede o no ser libremente escogido.
Las criaturas tenemos límites. Nuestra libertad no es absoluta. Es cierto que muchos no escogen ser solteros y lo son. Igualmente, hay muchos que tienen situaciones de trabajo y de salud que ellos no escogieron. Mientras las cosas no se puedan cambiar, lo sabio es SABER VIVIR LA REALIDAD Y DESCUBRIR DENTRO DE ELLA LO QUE PODEMOS HACER MEJOR CON NUESTRO ESFUERZO. Ahí está nuestra libertad. Cuando la utilizamos bien y no perdemos tiempo quejándonos, descubriremos que La felicidad no esta en ser soltero o casado sino en vivir plenamente lo que somos en comunión con Dios. Si ahora no entiendes eso, Jesús te quiere enseñar pero debes confiar que el SI PUEDE hacerte feliz como soltero si esa es su voluntad para ti.
La libertad se ejerce utilizando bien las posibilidades que tenemos.
Nuestra libertad no es absoluta, pero si tenemos libertad para descubrir nuestras posibilidades y desarrollarlas al máximo para amar. Quien desea casarse y no puede no deja de ser libre porque puede con su soltería hacer mucho bien o mucho mal.
Si usted se obstina en pensar que debe ser casado para ser feliz se equivoca. La felicidad es la presencia de Dios en nuestro corazón aun en medio de situaciones de cruz. La puede tener un soltero o un casado. La puede tener un enfermo, un prisionero, un ciego.
Usted encontrará la felicidad si abre su corazón a Dios y le permite a El darle su amor.
Somos libres para decidirnos por el bien o el mal, para abrir o cerrar el corazón a Dios. Podemos arrepentirnos y ser perdonados. Pero no podemos evitar las consecuencias de esas decisiones. -Padre Jordi Rivero
Testimonio de una soltera
Yo también soy soltera y convencida de mi fidelidad a Dios desde este estado de vida, que a veces ha sido verdaderamente heroico mantener y he mantenido por la gracia y fuerza encontrada en la formación en la oración y en los sacramentos. A veces me tienta sinceramente pensar que soy desdichada por no tener una familia como la mayoría de las personas con las que me relaciono, y aun mas estando en un país sola sin familia y sin amigos.
...lo que duele es sentirse solo, porque sin matrimonio y sin sexo podemos vivir, pero no así sin amor... Lo que un soltero necesita son amistades profundas que le ayuden a vivir con fidelidad su estado, pero a veces lamentablemente en nuestras parroquias hay muchos grupos de jóvenes, pero los que como yo, ya no son tan jóvenes, estamos solos y no encontramos donde encajar como solteros comprometidos por el Reino.
Es importante que en nuestras parroquias se nos ofrezca participar mas activamente en apostolados comprometidos donde poder encontrar desde las características de nuestra disponibilidad, la vocación a la virginidad a la que somos llamados dentro de la Iglesia. Nuestras energías irían encaminadas al servicio y eso es una gran realización por la que nadie tendría que sentirse frustrado por no haberse casado.
RESPUESTA
Gracias por su comentario. Le animo a que no espere que en su parroquia ofrezcan oportunidades. Los sacerdotes tienen muchas obligaciones y necesitan ayuda de personas como usted que TOMEN LA INICIATIVA. Habrá que luchar porque los inicios siempre son difíciles. Pero creo que al escribir usted ya ha dado el primer paso. Quizás pueda comenzar en algún grupo aunque no sean todos solteros. Si en la parroquia no encuentra un grupo ni puede comenzarlo, de seguro que en su ciudad habrá algún movimiento católico muy contento de recibirla. ADELANTE QUE JESUS LA NECESITA. -Padre Jordi Rivero
