El Secreto de Fátima

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Las tres partes del secreto
Comentario del Cardenal Ratzinger
Cronología

Clarificaciones:

En la tercera aparición de 1917, la Virgen dio a los niños un secreto que hoy se conoce como "El Secreto de Fátima".  En agosto 1941, que Lucía mencionó por primera vez la división de este secreto en tres partes. Dijo Lucía:

"El secreto esta compuesto de tres temas diferentes y voy a revelar dos de ellos:

1- El primero es la visión del infierno y la designación del Corazón Inmaculado de María como el remedio supremo ofrecido por Dios a la humanidad para la salvación de las almas. 

2- El segundo, es la profecía concerniente a una paz milagrosa que Dios desea otorgar al mundo a través de la consagración de Rusia al Corazón Inmaculado de María y la práctica de la comunión de los primeros cinco sábados de mes".

Lucía no hizo pública la tercera parte del secreto que se mantuvo en el archivo Vaticano hasta que el Papa, con Lucía presente, finalmente, el 13 de mayo del 2000 lo promulgó durante la beatificación de los otros dos pastorcitos, Francisco y Jacinta.


PRIMERA Y SEGUNDA PARTE DEL «SECRETO»
EN LA REDACCIÓN HECHA POR SOR LUCÍA
EN LA «TERCERA MEMORIA» DEL 31 DE AGOSTO DE 1941
DESTINADA AL OBISPO DE LEIRIA-FÁTIMA

TEXTO:

Tendré que hablar algo del secreto, y responder al primer punto interrogativo.

¿Qué es el secreto? Me parece que lo puedo decir, pues ya tengo licencia del Cielo. Los representantes de Dios en la tierra me han autorizado a ello varias veces y en varias cartas; juzgo que V. Excia. Rvma. conserva una de ellas, del R. P. José Bernardo Gonçalves, aquella en que me manda escribir al Santo Padre. Uno de los puntos que me indica es la revelación del secreto. Sí, ya dije algo; pero, para no alargar más ese escrito que debía ser breve, me limité a lo indispensable, dejando a Dios la oportunidad de un momento más favorable.

Pues bien; ya expuse en el segundo escrito, la duda que, desde el 13 de junio al 13 de julio, me atormentó; y cómo en esta aparición todo se desvaneció.

Ahora bien, el secreto consta de tres partes distintas, de las cuales voy a revelar dos.

La primera fue, pues, la visión del infierno.

Nuestra Señora nos mostró un gran mar de fuego que parecía estar debajo de la tierra. Sumergidos en ese fuego, los demonios y las almas, como si fuesen brasas transparentes y negras o bronceadas, con forma humana que fluctuaban en el incendio, llevadas por las llamas que de ellas mismas salían, juntamente con nubes de humo que caían hacia todos los lados, parecidas al caer de las pavesas en los grandes incendios, sin equilibrio ni peso, entre gritos de dolor y gemidos de desesperación que horrorizaba y hacía estremecer de pavor. Los demonios se distinguían por sus formas horribles y asquerosas de animales espantosos y desconocidos, pero transparentes y negros.

Esta visión fue durante un momento, y ¡gracias a nuestra Buena Madre del Cielo, que antes nos había prevenido con la promesa de llevarnos al Cielo! (en la primera aparición). De no haber sido así, creo que hubiésemos muerto de susto y pavor.


(Primera parte, Remedio)
Inmediatamente levantamos los ojos hacia Nuestra Señora que nos dijo con bondad y tristeza:

-- Visteis el infierno a donde van las almas de los pobres pecadores; para salvarlas, Dios quiere establecer en el mundo la devoción a mi Inmaculado Corazón. Si se hace lo que os voy a decir, se salvarán muchas almas y tendrán paz.

(Segunda parte)
La guerra pronto terminará. Pero si no dejaren de ofender a Dios, en el pontificado de Pío XI comenzará otra peor. Cuando veáis una noche iluminada por una luz desconocida, sabed que es la gran señal que Dios os da de que va a castigar al mundo por sus crímenes, por medio de la guerra, del hambre y de las persecuciones a la Iglesia y al Santo Padre.

(Segunda parte, Remedio)
Para impedirla, vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón y la Comunión reparadora de los Primeros Sábados. Si se atienden mis deseos, Rusia se convertirá y habrá paz; si no, esparcirá sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia. Los buenos serán martirizados y el Santo Padre tendrá mucho que sufrir; varias naciones serán aniquiladas. Por fin mi Inmaculado Corazón triunfará. El Santo Padre me consagrará a Rusia, que se convertirá, y será concedido al mundo algún tiempo de paz.


Síntesis y reflexión

Primera parte
1- Problema: Pecado que conduce al infierno
2- Remedio: Devoción y obediencia al Inmaculado Corazón de María.

Segunda parte
1-
Problema: Pecado que lleva a la guerra, hambre, persecución de la Iglesia y del Santo Padre.
2- Remedio: consagración de Rusia al Inmaculado Corazón y comunión reparadora de los primeros sábados.

Con la Virgen María (consagración a su Corazón Inmaculado) vamos a Jesús (Eucaristía).

-El Santo Padre ha realizado varias consagraciones en comunión con los obispos:

El 25 de Marzo de 1984. (Fiesta de la Anunciación) en la Plaza de San Pedro . El Santo Padre, en unión espiritual con los obispos del mundo, quienes habían sido convocados, confió a todos los hombres y mujeres y todos los pueblos al Inmaculado Corazón de María. El Papa repitió la consagración en 1987 y en el año 2000.

Existe una controversia referente a si estas consagraciones satisfacen la petición de la Virgen hecha en el secreto de Fátima. Nos parece que debemos confiar en el Santo Padre que ha sido escogido por la Virgen y que nos sobrepasa en santidad y sabiduría.  

3-Consecuencia de responder a la Virgen: Rusia se convertirá y habrá paz
4-Consecuencias de no responder: Rusia esparcirá sus errores por el mundo (comunismo y ateismo) promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia. Martirio.
5-Seguridad de victoria final: "Por fin mi Inmaculado Corazón triunfará" El Papa consagrará a Rusia que se convertirá y habrá paz.


TERCERA PARTE DEL SECRETO DE FATIMA
(Ver también: Página del Vaticano sobre el Secreto de Fátima)

Revelado el 13 de julio de 1917 a los tres pastorcitos en Cova de Iria, Fátima, transcrito por Sor Lucía el 3 de enero de 1944. La tercera parte del Secreto de Fátima se mantuvo en secreto hasta el año jubilar del 2000. Su promulgación fue anticipada el 13 de mayo del 2000 al final da la Santa Misa en Fátima, cuando el Papa Juan Pablo II beatificó los niños videntes Francisco y Jacinta. Finalmente fue dado a conocer por la Santa Sede el 26 de Junio del 2000 junto con varios comentarios

TEXTO:

"Escribo en obediencia a Vos, Dios mío, que lo ordenáis por medio de Su Excelencia Reverendísima el Señor Obispo de Leiria y de la Santísima Madre vuestra y mía.

"Después de las dos partes que ya he expuesto, hemos visto al lado izquierdo de Nuestra Señora un poco más en lo alto a un Angel con una espada de fuego en la mano izquierda; centelleando emitía llamas que parecía iban a incendiar el mundo; pero se apagaban al contacto con el esplendor que Nuestra Señora irradiaba con su mano derecha dirigida hacia él; el Angel señalando la tierra con su mano derecha, dijo con fuerte voz: ¡Penitencia, Penitencia, Penitencia! Y vimos en una inmensa luz qué es Dios: 'algo semejante a como se ven las personas en un espejo cuando pasan ante él' a un Obispo vestido de Blanco 'hemos tenido el presentimiento de que fuera el Santo Padre'. También a otros Obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas subir una montaña empinada, en cuya cumbre había una gran Cruz de maderos toscos como si fueran de alcornoque con la corteza; el Santo Padre, antes de llegar a ella, atravesó una gran ciudad medio en ruinas y medio tembloroso con paso vacilante, apesadumbrado de dolor y pena, rezando por las almas de los cadáveres que encontraba por el camino; llegado a la cima del monte, postrado de rodillas a los pies de la gran Cruz fue muerto por un grupo de soldados que le dispararon varios tiros de arma de fuego y flechas; y del mismo modo murieron unos tras otros los Obispos sacerdotes, religiosos y religiosas y diversas personas seglares, hombres y mujeres de diversas clases y posiciones. Bajo los dos brazos de la Cruz había dos Angeles cada uno de ellos con una jarra de cristal en la mano, en las cuales recogían la sangre de los Mártires y regaban con ella las almas que se acercaban a Dios".


Algunos dicen que, aunque el texto de arriba, promulgado por la Santa Sede en el año 2000, aunque verdadero, no es completo. Se fundamentan en varias publicaciones y supuestas declaraciones del Papa a la conferencia episcopal alemana en 1981. Aunque fuese cierto, nos parece que si el Papa, siendo el vicario de Cristo, estima que no deben darse a conocer, sería imprudente indagar sobre ello. Atendamos a lo que se nos ha dado y respondamos de todo corazón.


Comentario Teológico del Cardenal Ratzinger a la tercera parte del secreto. 

(NOTA:  El Cardenal Ratzinger humildemente reconoce al principio del texto que su comentario es "intento de interpretación". No es por tanto a una interpretación definitiva de la iglesia.  Pero si se le debe una respetuosa consideración ya que el Papa ha querido que este comentario acompañe a la publicación de la tercera parte del secreto de Fátima.) 

Aquí ofrecemos un resumen del comentario.   Texto Completo >>>

RESUMEN

"la palabra clave de este 'secreto' es el triple grito: '¡Penitencia, Penitencia, Penitencia!'.

Comprender los signos de los tiempos significa comprender la urgencia de la penitencia, de la conversión y de la fe.

"El ángel con la espada de fuego a la derecha de la Madre de Dios recuerda imágenes análogas en el Apocalipsis. Representa la amenaza del juicio que incumbe sobre el mundo. La perspectiva de que el mundo podría ser reducido a cenizas en un mar de llamas, hoy no es considerada absolutamente pura fantasía: el hombre mismo ha preparado con sus inventos la espada de fuego".

La visión muestra después la fuerza que se opone al poder de destrucción: el esplendor de la Madre de Dios,

El Papa parece que precede a los otros, temblando y sufriendo por todos los horrores que lo rodean... su camino pasa en medio de los cuerpos de los muertos. El camino de la Iglesia se describe así como un viacrucis,  como camino en un tiempo de violencia, de destrucciones y de persecuciones.  ... en el viacrucis de este siglo "la figura del Papa tiene un papel especial.

'fue una mano materna la que guió la trayectoria de la bala y el Papa agonizante se detuvo en el umbral de la muerte' (Juan Pablo habla el 13 de mayo de 1994)... muestra sólo una vez más que no existe un destino inmutable, que la fe y la oración son poderosas, que pueden influir en la historia y, que al final, la oración es más fuerte que las balas, la fe más potente que las divisiones".

Los ángeles recogen bajo los brazos de la cruz la sangre de los mártires y riegan con ella las almas que se acercan a Dios...ningún sufrimiento es vano y, precisamente una Iglesia sufriente, una Iglesia de mártires, se convierte en señal orientadora para la búsqueda de Dios por parte del hombre...del sufrimiento de los testigos deriva una fuerza de purificación y de renovación, porque es actualización del sufrimiento mismo de Cristo y transmite en el presente su eficacia salvífica".

'los acontecimientos a los que se refiere la tercera parte del 'secreto' de Fátima parecen pertenecer ya al pasado...

Lo que queda de válido...: la exhortación a la oración como camino para la 'salvación de las almas' y, en el mismo sentido, la llamada a la penitencia y a la conversión". 

'mi Corazón Inmaculado triunfará'.
¿Qué quiere decir esto? Que el corazón abierto a Dios, purificado por la contemplación de Dios, es más fuerte que los fusiles y que cualquier tipo de arma.

El Comentario Teológico del Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe está dividido en tres partes: Revelación pública y revelaciones privadas, su lugar teológico; La estructura antropológica de las revelaciones privadas; Un intento de interpretación del secreto de Fátima.

1) "El término 'revelación pública' designa la acción reveladora de Dios destinada a toda la humanidad, que ha encontrado su expresión literaria en las dos partes de la Biblia: el Antiguo y el Nuevo Testamento. Se llama 'revelación' porque en ella Dios se ha dado a conocer progresivamente a los hombres, hasta el punto de hacerse él mismo hombre, para atraer a sí y para reunir en sí a todo el mundo por medio del Hijo encarnado, Jesucristo.

En Cristo Dios ha dicho todo, es decir, se ha manifestado a sí mismo y, por lo tanto, la revelación ha concluido con la realización del misterio de Cristo que ha encontrado su expresión en el Nuevo Testamento".

2)La "revelación privada", en cambio, "se refiere a todas las visiones y revelaciones que tienen lugar una vez terminado el Nuevo Testamento; es ésta la categoría dentro de la cual debemos colocar el mensaje de Fátima.

La autoridad de las revelaciones privadas es esencialmente diversa de la única revelación pública: ésta exige nuestra fe". La revelación privada, en cambio, "es una ayuda para la fe, y se manifiesta como creíble precisamente porque remite a la única revelación pública".

Citando al teólogo flamenco E. Dhanis, el prefecto para la Fe afirma que "la aprobación eclesiástica de una revelación privada contiene tres elementos: el mensaje en cuestión no contiene nada que vaya contra la fe y las buenas costumbres; es lícito hacerlo público, y los fieles están autorizados a darle en forma prudente su adhesión". "Un mensaje así puede ser una ayuda válida para comprender y vivir mejor el Evangelio en el momento presente; por esto no se debe descartar. Es una ayuda que se ofrece, pero no es obligatorio hacer uso de la misma".

El cardenal Ratzinger subraya también que "la profecía en el sentido de la Biblia no quiere decir predecir el futuro, sino explicar la voluntad de Dios para el presente, lo cual muestra el recto camino hacia el futuro".

La parte más importante del Comentario Teológico está dedicada a "un intento de interpretación del secreto de Fátima". Del mismo modo que la palabra clave de la primera y de la segunda parte del "secreto" es la de "salvar almas", "la palabra clave de este 'secreto' es el triple grito: '¡Penitencia, Penitencia, Penitencia!'. Viene a la mente el comienzo del Evangelio: 'paenitemini et credite evangelio' (Mc 1,15). Comprender los signos de los tiempos significa comprender la urgencia de la penitencia, de la conversión y de la fe. Esta es la respuesta adecuada al momento histórico, que se caracteriza por grandes peligros y que serán descritos en las imágenes sucesivas. Me permito insertar aquí un recuerdo personal: en una conversación conmigo, Sor Lucia me dijo que le resultaba cada vez más claro que el objetivo de todas las apariciones era el de hacer crecer siempre más en la fe, en la esperanza y en la caridad. Todo el resto era sólo para conducir a esto".

3) Las "imágenes" del secreto

"El ángel con la espada de fuego a la derecha de la Madre de Dios recuerda imágenes análogas en el Apocalipsis. Representa la amenaza del juicio que incumbe sobre el mundo. La perspectiva de que el mundo podría ser reducido a cenizas en un mar de llamas, hoy no es considerada absolutamente pura fantasía: el hombre mismo ha preparado con sus inventos la espada de fuego".

"La visión muestra después la fuerza que se opone al poder de destrucción: el esplendor de la Madre de Dios, y proveniente siempre de él, la llamada a la penitencia. De este modo se subraya la importancia de la libertad del hombre: el futuro no está determinado de un modo inmutable, y la imagen que vieron los niños no es una película anticipada del futuro, de la cual nada podría cambiarse. En realidad, toda la visión tiene lugar sólo para llamar la atención sobre la libertad y para dirigirla en una dirección positiva. (...) Su sentido es el de movilizar las fuerzas del cambio hacia el bien. Por eso están totalmente fuera de lugar las explicaciones fatalísticas del 'secreto' que dicen que el atentador del 13 de mayo de 1981 habría sido en definitiva un instrumento de la Providencia. (...) La visión habla más bien de los peligros y del camino para salvarse de los mismos".

Pasando a las siguientes imágenes, "el lugar de la acción aparece descrito con tres símbolos: una montaña escarpada, una gran ciudad medio en ruinas, y finalmente una gran cruz de troncos rústicos. Montaña y ciudad simbolizan el lugar de la historia humana: la historia como costosa subida hacia lo alto, la historia como lugar de la humana creatividad y de la convivencia, pero al mismo tiempo como lugar de las destrucciones, en las que el hombre destruye la obra de su propio trabajo (...) Sobre la montaña está la cruz, meta y punto de orientación de la historia. En la cruz la destrucción se transforma en salvación; se levanta como signo de la miseria de la historia y como promesa para la misma".

"Aparecen después aquí personas humanas: el Obispo vestido de blanco ('hemos tenido el presentimiento de que fuera el Santo Padre'), otros Obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas y, finalmente, hombres y mujeres de todas las clases y estratos sociales. El Papa parece que precede a los otros, temblando y sufriendo por todos los horrores que lo rodean. No sólo las casas de la ciudad están medio en ruinas, sino que su camino pasa en medio de los cuerpos de los muertos. El camino de la Iglesia se describe así como un viacrucis, como camino en un tiempo de violencia, de destrucciones y de persecuciones. En esta imagen, se puede ver representada la historia de todo un siglo. Del mismo modo que los lugares de la tierra están sintéticamente representados en las dos imágenes de la montaña y de la ciudad, y están orientados hacia la cruz, también los tiempos son representados de forma compacta".

"En la visión podemos reconocer el siglo pasado como siglo de los mártires, como siglo de los sufrimientos y de las persecuciones contra la Iglesia, como el siglo de las guerras mundiales y de muchas guerras locales que han llenado toda su segunda mitad y han hecho experimentar nuevas formas de crueldad. En el 'espejo' de esta visión vemos pasar a los testigos de la fe de decenios".

El prefecto de la Congregación de la Doctrina de la Fe afirma también que en el viacrucis de este siglo "la figura del Papa tiene un papel especial. En su fatigoso subir a la montaña podemos encontrar indicados con seguridad juntos diversos Papa, que empezando por Pío X hasta el Papa actual han compartido los sufrimientos de este siglo y se han esforzado por avanzar entre ellos por el camino que lleva a la cruz. En la visión también el Papa es matado en el camino de los mártires) No podía el Santo Padre, cuando después del atentado del 13 de mayo de 1981 se hizo llevar el texto de la tercera parte del 'secreto', reconocer en él su propio destino? Había estado muy cerca de las puertas de la muerte y él mismo explicó el haberse salvado con las siguientes palabras: 'fue una mano materna la que guió la trayectoria de la bala y el Papa agonizante se detuvo en el umbral de la muerte' (13 de mayo de 1994). Que 'una mano materna' haya desviado la bala mortal muestra sólo una vez más que no existe un destino inmutable, que la fe y la oración son poderosas, que pueden influir en la historia y, que al final, la oración es más fuerte que las balas, la fe más potente que las divisiones".

La conclusión del secreto, prosigue el cardenal Ratzinger, "recuerda imágenes que Lucía puede haber visto en libros piadosos, y cuyo contenido deriva de antiguas intuiciones de fe. Es una visión consoladora, que quiere hacer maleable por el poder salvador de Dios una historia de sangre y lágrimas. Los ángeles recogen bajo los brazos de la cruz la sangre de los mártires y riegan con ella las almas que se acercan a Dios. La sangre de Cristo y la sangre de los mártires están aquí consideradas juntas: la sangre de los mártires fluye de los brazos de la cruz. Su martirio se lleva a cabo de manera solidaria con la pasión de Cristo y se convierte en una sola cosa con ella".

"La visión de la tercera parte del secreto tan angustiosa en su comienzo, se concluye pues con una imagen de esperanza: ningún sufrimiento es vano y, precisamente una Iglesia sufriente, una Iglesia de mártires, se convierte en señal orientadora para la búsqueda de Dios por parte del hombre (...) del sufrimiento de los testigos deriva una fuerza de purificación y de renovación, porque es actualización del sufrimiento mismo de Cristo y transmite en el presente su eficacia salvífica".

¿Qué significa en su conjunto (en sus tres partes), el "secreto" de Fátima?, se pregunta por último el cardenal Ratzinger. "Ante todo debemos afirmar con el cardenal Sodano: 'los acontecimientos a los que se refiere la tercera parte del 'secreto' de Fátima parecen pertenecer ya al pasado'. En la medida en que se refiere a acontecimientos concretos ya pertenecen al pasado. Quien había esperado impresionantes revelaciones apocalípticas sobre el fin del mundo o sobre el curso futuro de la historia se desilusionará. Fátima no nos ofrece este tipo de satisfacción de nuestra curiosidad, lo mismo que la fe cristiana no quiere y no puede ser un mero alimento para nuestra curiosidad. Lo que queda de válido lo hemos visto de inmediato al inicio de nuestras reflexiones sobre el texto del 'secreto': la exhortación a la oración como camino para la 'salvación de las almas' y, en el mismo sentido, la llamada a la penitencia y a la conversión".

"Quisiera al final volver aún sobre otra palabra clave del 'secreto', que con razón se ha hecho famosa: 'mi Corazón Inmaculado triunfará'.¿Qué quiere decir esto? Que el corazón abierto a Dios, purificado por la contemplación de Dios, es más fuerte que los fusiles y que cualquier tipo de arma. El fiat de María, la palabra de su corazón, ha cambiado la historia del mundo, porque ella ha introducido en el mundo al Salvador, porque gracias a este 'sí' Dios pudo hacerse hombre en nuestro mundo y así permanece ahora y para siempre. El maligno tiene poder en este mundo, lo vemos y lo experimentamos continuamente; él tiene poder porque nuestra libertad se deja alejar continuamente de Dios".

"Pero desde que Dios mismo tiene corazón humano y de ese modo ha dirigido la libertad del hombre hacia el bien, hacia Dios, la libertad hacia el mal ya no tiene la última palabra. Desde aquel momento cobran todo su valor las palabras de Jesús: 'padeceréis tribulaciones en el mundo, pero tened confianza; yo he vencido al mundo' (Jn 16,33). El mensaje de Fátima nos invita a confiar en esta promesa".

 


Comentarios del Cardenal Ratzinger
15 años antes de la publicación del secreto.

Entrevista con Vittorio Messori (Publicada bajo el título "Informe Sobre la Fe", 1985, BAC, Madrid. pgs 118-119).

Sus palabras de entonces concuerdan perfectamente con su comentario arriba. Las publicamos porque nos ayudan a profundizar el significado del secreto: 

Messori: "Ha leído usted el llamado "tercer secreto de Fátima" el que sor Lucía, la única superviviente del grupo de videntes, hizo llegar a Juan XXIII, y que el Papa después de haberlo examinado, confió al predecesor de usted, cardenal Ottaviani, ordenándole que lo depositara en los archivos del Santo Oficio?

La respuesta es inmediata, seca: "Si, lo he leído".

Messori: Circulan en el mundo versiones nunca desmentidas que describen el contenido de este "secreto" como inquietante, apocalíptico y anunciador de terribles sufrimientos. El mismo Juan Pablo II, en su visita pastoral a Alemania, pareció confirmar (si bien con prudentes rodeos, hablando privadamente con un grupo de invitados cualificados) el contenido, no precisamente alentador, de este escrito.  Antes que él, Pablo VI, en su peregrinación a Fátima, parece haber aludido también a los temas apocalípticos del "secreto". ¿Por qué no se ha decidido nunca a publicarlo, aunque no fuera más que para evitar suposiciones aventuradas?.

Ratzinger: "Si hasta ahora (1985) no se ha tomado esta decisión no es porque los papas quieran esconder algo terrible".

Messori: Entonces, insisto, ¿hay "algo terrible" en el manuscrito de sor Lucía?

Ratzinger: Aunque así fuera -replica, escogiendo las palabras-, esto no haría mas que confirmar la parte ya conocida del mensaje de Fátima. Desde aquel lugar se lanzó al mundo una severa advertencia, que va en contra de la facilonería imperante; una llamada a la seriedad de la vida, de la historia, ante los peligros que se ciernen sobre la humanidad. Es lo mismo que Jesús recuerda con harta frecuencia; no tuvo reparo en decir: "Si no os convertís, todos pereceréis" (Lc 13,3). La conversión -y Fátima nos lo recuerda sin ambages- es una exigencia constante de la vida cristiana. Deberíamos saberlo por la Escritura entera». (enfasis añadido)

Messori: ¿Quiere esto decir que no habrá publicación, al menos por ahora?

Ratzinger: «El Santo Padre juzga que no añadiría nada a lo que un cristiano debe saber por la Revelación y, también, por las apariciones marianas aprobadas por la Iglesia, que no hacen sino confirmar la necesidad urgente de penitencia, de conversión, de perdón, de ayuno. Publicar el «tercer secreto" significaría también exponerse a los peligros de una utilización sensacionalista de su contenido».

Ratzinger enfatiza lo que podemos aprender del mensaje de Fátima:

-Un llamado radical a la conversión y a la penitencia.
-la gravedad absoluta del momento histórico
-los peligros que se presentan en la vida de la fe y del mundo
-la importancia y actualidad de los últimos tiempos.


Cronología del Secreto de Fátima

-1917: La Virgen Santísima revela un secreto a tres pastorcitos.

-1943: Lucía padece una enfermedad muy grave. El Obispo de Leiria, Mos. José Alves de Silva le insta a que escriba el secreto.

-1944: En Enero, la Virgen se manifiesta a Lucía y le confirma que escriba el secreto. Lucía lo escribe y lo mete en un sobre sellado.

Hace entrega del texto a la jerarquía de la Iglesia en junio de 1944 y pide que el tercer secreto sea abierto y leído al mundo, al morir ella, o a mas tardar en el año 1960, lo que ocurriese primero.

-1946: el teólogo Barthas pregunta a Lucía por qué se habría de esperar hasta 1960 para revelar el secreto. Ella responde:"porque en ese momento será mas claro el contenido del secreto".

-1957: llega a Roma pedido por el Santo Oficio (Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe), se coloca en un pequeño cofre en la oficina del Papa Pío XII.

-1958: muere el Papa Pío XII y el sobre estaba sin abrir.

-1959: el Papa Juan XXIII leyó el secreto en agosto, pero debido a las dificultades que surgieron por expresiones del idioma, se requirió la presencia del traductor portugués Mons. Paulo José Tavares. Mas tarde el Papa hizo que lo leyera el Cardenal Ottaviani, el Prefecto entonces, de la S.C. para la Doctrina de la Fe. No se divulgó.

-1960: se supo en comunicado que el tercer secreto no debía ser publicado.

-1967: Cardenal Ottaviani en nombre del Papa Pablo VI hizo una larga declaración explicando el porque no se había revelado.

-El Papa J.P.II y el Card. Joseph Ratzinger, PSCDF, conocían el contenido del secreto. A este respecto, JPII, en 1980, contestó a las preguntas de periodistas acerca de porque no se había revelado el secreto: "Dada la gravedad del contenido, para no provocar a la potencia mundial del comunismo a tomar ciertas determinaciones, mis predecesores en el oficio de Pedro, han preferido aplazar su publicación...muchos quieren saber solo por curiosidad y por gusto sensacionalista, pero olvidan que el saber conlleva una responsabilidad....Aquí esta el remedio contra este mal: REZAD y confiad todo lo demás a la Madre de Dios.

-13 de Mayo del 2000, Fátima, al final de la beatificación de los videntes en Fátima, el Cardenal Sodano en nombre del Santo Padre reveló parte del secreto relacionado con su pontificado y afirmó, con la aprobación de Sor Lucía, allí presente, que Juan Pablo II es el Papa a que hace referencia el secreto.  Anunció además que todo el secreto será revelado junto con un comentario. Esto ocurre el 26 de junio del 2000.  

 


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